Chris Anderson en el número de agosto del 2010 de la revista Wired Magazine realizó un reportaje que fue portada no sólo en su propia revista sino en muchas otras por el impacto que causó. La portada de ese número ponía en letras bien grandes "The Web is Dead", es decir, la Web está muerta.
Yo me encontraba en ese momento en el proceso de desarrollo de nuestra página KC Solutions, y la verdad es que no me hizo nada de gracia aquel titular.
Hacía ya tiempo que daba vueltas acerca de cómo debía ser la web que debíamos desarrollar.
Por lo general, existen dos grandes tipos de páginas web: aquellas que son meramente informativas y otras que suelen ser funcionales. De las primeras hablaríamos de las típicas páginas de empresas que van destinadas a informar acerca de sus productos, poder contactar con ellos, etc.
El segundo tipo serían aquellas páginas que te permiten comprar billetes, realizar trámites de documentación o cosas por el estilo.
Si os lo ponéis a pensar, la afirmación de Wired no es tan aberrante. ¿Qué páginas visitáis normalmente? ¿Soléis entrar en las páginas de las empresas? ¿Os creéis las cosas que ponen?
Yo personalmente sólo suelo entrar a las páginas de viajes para gestionar mis billetes y mis tarjetas de embarque o visito las páginas de la competencia para evaluar y conocer sus avances, que la verdad, son pocos o simplemente no actualizan la web (otro de los grandes problemas de muchas páginas en la red).
La revista Wired lo que nos venía a decir, es que la red está cambiando. Que la preferencias y usos de la red son diferentes, que nuestro tiempo cada vez es menor para dedicar a las cosas que nos interesan y que la movilidad hace que las webs deban adaptarse a ello también.
Las redes sociales, los blogs, las aplicaciones para tabletas y teléfonos serán fundamentales en la nueva era de la comunicación.
De ahí surge el inicio de cómo comenzamos a desarrollar el mundo virtual KC Solutions y todo lo que se genera a su alrededor.
Nuestra web debía contener elementos diferenciados y claramente útiles. Tanto para el profesional como para el paciente.
Debía ser claramente funcional y útil para todos.
Y eso...no tenía pinta de ser nada fácil al principio...
Me viene perfecta esta reflexion, pues como sabes estoy en proceso de crear mi propia web. La realidad es la que es y hay que acercarse al publico en la forma en la que este elige para informarse. Lo tendre en cuenta.
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